miércoles, 23 de abril de 2008

Feliz día del libro.

Pues si, hoy 23 de abril, es el día institucionalizado del libro.

Aunque sea otro maldito invento comercial, por lo menos fomenta la compra de libros, aunque lo de ser leídos es otro cantar.

Además de los miles de libros publicados a lo largo del año no todos son de escritores, muchos famosillos aprovechan el tirón popular para rellenar con palabras hojas en blanco, o se limitan a firmar el trabajo que les han hecho otros.

Estamos en un país en que la ignorancia ha sido recompensada a lo largo de la historia, y aquel que se distinguía por saber sobre alguno o varios temas, destacando entre la mediocridad general, fue a menudo calificado de pedante o sabelotodo, todo ello debido a la maldita envidia cainística que siempre ha regido las almas patrias.

Siempre he tenido la curiosidad de leer todo lo que ha caído en mis manos, historia, arte, novela, filosofía, poesía, catálogos de Ikea, apuntes de la carrera de mi hermano etc etc, es una necesidad fisiológica.

Nunca fui un niño retraído, pero me encantaba y me sigue encantando pasar horas con un libro a solas, viviendo una vida paralela.

En mi infancia puedo destacar grandes obras que me hicieron feliz, libros de Emilio Salgari, ese Sandokán que me hacía desear tener una negra barba con 12 años o el corsario Negro que me daba ganas de abordar el navío más temible a su lado, Julio Verne y su valiente y honrado Miguel Strogoff, correo del zar o Alejandro Dumas y sus leales mosqueteros.

Junto a ellos en el mundo cómic Tintín y su inseparable Capitán Archibald Haddock, Roberto Alcazar y Pedrín, el guerrero del Antifaz , Corto Maltés o el Capitán Trueno y sus fieles amigos.

Momentos de evasión en que acompañabas a tus héroes en instantes mágicos e irrepetibles que ni los más novedosos videojuegos llenos de efectos especiales pueden repetir. El poder de la palabra.

Ahora todo es electrónica, mp3, móviles de diseño y mil usos, hacer el imbécil para colgarlo en youtube y hacerte famoso o ver a los miles de aspirantes a estrella de la canción que hay en infinitos programas de la televisión.

Pero eso era antes, porque lo de leer es algo préterito, olvidado y vilipendiado, en extinción, y que decir de lo poco que ha ayudado los despropósitos políticos convertidos en reformas educativas. El último informe PISA atestigua que 2 de cada 3 estudiantes de 18 años, tienen falta de comprensión lectora, o sea que no saben ni lo que leen.
Y cada año se pasa de curso con más suspensos, para que aprender si me regalan en título de la ESO y además lo que yo quiero es cantar, ¡mama quiero ser artista!

Hay estaba la ministra de Educación, Mercedes Cabrera, defendiendo el sistema actual y su gran éxito, ya que «el sistema educativo español no sólo lo hace bien, sino que lo hace muy bien» y que éste no ha fracasado porque «es capaz de responder a los retos que tiene la sociedad», entre ellos el de que «los jóvenes tienen su propio lenguaje: el chat y el sms».

Ahí es nada señores.Cuesta abajo y sin frenos.

¿Sabes leer sms con ese lenguaje destructivo del idioma? enhorabuena, eres un hombre de tu tiempo. actualizado y puesto en las nuevas tecnologías.

El método perfecto de tener borregos por ciudadanos, sin crítica, ni aspiraciones más allá de vestir a la última moda, no vaya a ser un día espabilemos y digamos "hasta aquí hemos llegado".

Yo prefiero refugiarme en los libros a modo de parapeto frente a esta estupidez de demagogos y cantamañas

El día que perdamos el sentido y el valor de las palabras, volveremos a ser bestias. Y de camino andamos.

Mientras involucionamos les dejo con un proverbio hindú.

"Un libro abierto es un cerebro que habla; cerrado un amigo que espera; olvidado, un alma que perdona; destruido, un corazón que llora."